
Biografía
Nació el 28 de marzo de 1914 en Brno y, a los cinco años, su familia se mudó a Nymburk. En esa ciudad de Bohemia Central terminó la escuela secundaria y empezó a entrar en contacto con un mundo que le daría mucha inspiración. En sus obras hay rasgos de corrientes tan diversas como el surrealismo y el naturalismo, y también una importante influencia de algunos de los escritores más destacados del siglo XX: James Joyce, Dylan Thomas y Jack Kerouac. Durante la ocupación nazi fue notario público, agente de seguros, viajante de comercio, empleado ferroviario, obrero siderúrgico y, a partir de 1954, trabajó como embalador de papel. Ya con cuarenta años, a partir de la década de los 60, pudo dedicarse a la literatura // En Radio Prague International.
Tríptico de los gatos
“El Génesis lo calla pero el gato debe de haber sido el primer animal sobre la Tierra, el núcleo a partir del cual se generaron todas las espe- cies. En una de sus andanzas por el planeta humeante el gato inventó a los seres humanos. Su intención fue crearnos a su imagen y semejan- za. Un error ignorado lo llevó a formar gatos imperfectos. Si pudiera comprobarse que descendemos del gato, sería indispensable una reestructuración de las ciencias. Es demasiado incómoda para los sabios; por ello prefieren no investigar nuestros orígenes” // Por José Emilio Pacheco (“Tríptico del gato”).
La naturaleza de los gatos
“Los gatos no tenían ningún problema evolutivo al que enfrentarse en estado salvaje; no necesitaban depender del hombre para sobrevivir; no sufrieron las rápidas y automáticas transformaciones genéticas que destruyeron las barreras entre lo salvaje y lo domesticable, como en el caso de las bestias salvajes que se convirtieron en compañeras del hombre dúctiles y adaptables. Los hombres primitivos consiguieron domar con éxito a lobos, vacas, ovejas y otros animales verdaderamente domesticados debido en gran parte a que estas especies ya contaban con el potencial genético para domesticarse a sí mismas una vez que los humanos aparecieran en el medio ambiente donde habitaban. Los gatos, sin embargo, se negaron a entrar en este juego” // Por Stephen Budiansky, autor de La naturaleza de los gatos.
Siempre estaba comprando nuevos libros, más rápido, lo reconozco, de lo que mi capacidad de lectura me permitía leerlos. Pero mientras estuviera rodeado de ellos, eran garantes de una vida más amplia, mucho más preciosa y necesaria de la que me veía obligado a llevar cada día. Si era imposible mantener siempre esa vida superior, por lo menos podía tener sus signos al alcance de la mano
El hombre en suspenso / Saul Below